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¿Cómo comer sano? Consejos para tu dieta diaria

Una alimentación equilibrada es fundamental para mantener una buena salud y prevenir enfermedades. Comer sano no solo mejora tu bienestar general, sino que también te proporciona la energía y los nutrientes necesarios para afrontar el día a día.

A través del equipo de nutricionistas de https://proyectoart.com/nutricionista-barcelona/ hemos recapitulado una serie de consejos que te serán muy útiles para llevar una dieta diaria sana. ¿Quieres conocerlos? Te los mostramos a continuación.

  1. Apuesta por una dieta diversificada

A la hora de realizar una dieta, apuesta por solicitar la ayuda de una buena nutricionista. Así podrás tener la seguridad de que la dieta es diversa y vas a disfrutar de todos los nutrientes esenciales para poder disfrutar de una buena salud.

  • Granos enteros: los expertos suelen recomendar optar por los granos enteros en vez de los refinados. Al no estar refinados no se pierden nutrientes que son muy beneficiosos para la salud.
  • Grasas saludables: no todas las grasas son malas. Una buena dieta debe contar con grasas saludables. Esas grasas las podrás encontrar en alimentos como el aceite de oliva, aguacate o los frutos secos entre otros. Así te será más fácil absorber los nutrientes de otros alimentos y la salud del corazón será mejor.
  • Proteínas: son necesarias para la reparación y el crecimiento de tejidos. Puedes obtener proteínas de fuentes animales, como carnes magras, pescado y huevos, así como de fuentes vegetales, como legumbres, tofu y nueces.
  • Frutas y verduras: suelen estar presentes en todas las dietas por los muchos beneficios que ofrecen. Destacan por ser ricos en minerales, fibra y vitaminas, lo que hace que sean alimentos a tener muy en cuenta. Actualmente hay muchas opciones entre las que elegir, es decir, es fácil conseguir una dieta variada. 
  1. Bebe agua

La hidratación es realmente importante a la hora de comer sano. El agua tiene muchos beneficios. Por ejemplo, ayuda a eliminar las toxinas, mantiene el cuerpo y la piel hidratados y ayuda con la digestión. En conjunto, beber agua es fundamental. 

Normalmente se suele recomendar beber de uno a dos litros de agua al día, aunque todo dependerá de cada persona. Un buen nutricionista te dará la cantidad recomendada según tus necesidades. No solo se puede beber agua, también otros líquidos como el té o los zumos.

  1. Controla las porciones

Para evitar comer en exceso es fundamental tener un buen control del tamaño de las porciones. Si notas que tiendes a comer mucho, opta por usar platos más pequeños, así las porciones serán más pequeñas. Además, se recomienda comer despacio y masticar bien, así no tenemos la necesidad de comer tanto.

  1. Haz un plan de comidas

Es una gran herramienta a la hora de conseguir disfrutar de una dieta saludable. Con un buen plan evitarás comer cosas que no deberías comer. Si no cuentas con ayuda profesional, tómate algo de tiempo para realizar tu propio plan. No es difícil y te ayudará a conseguir tus objetivos. 

En la medida de lo posible intenta elaborar los platos en casa, así podrás saber qué ingredientes llevan los platos y te será más fácil sacar adelante la dieta. 

  1. Control el consumo de azúcar y sal

Limitar el consumo de azúcares añadidos y sal es fundamental para mantener una dieta saludable y prevenir enfermedades. Los azúcares añadidos, presentes en muchos alimentos procesados y bebidas, pueden contribuir al aumento de peso, diabetes tipo 2 y problemas dentales. 

Para reducir su ingesta, es importante leer las etiquetas de los productos y optar por versiones sin azúcar o endulzadas naturalmente, como con miel o jarabe de arce, en moderación. Por otro lado, un alto consumo de sal puede elevar la presión arterial y aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares. 

Para evitarlo, elige alimentos frescos y no procesados siempre que sea posible, y utiliza hierbas y especias para sazonar en lugar de sal. Hacer estos ajustes en la dieta ayuda a mantener un equilibrio nutricional adecuado y a promover una mejor salud a largo plazo.

  1. Conoce a tu cuerpo

Conocer a tu cuerpo te ayudará a comer sano y disfrutar de una dieta que realmente encaja con lo que necesitas. Como se suele decir, cada cuerpo es un mundo. Tenemos que aprender a conocernos para proporcionar al cuerpo lo que realmente necesita.

Por ejemplo, si ves que tu cuerpo tiene algún tipo de intolerancia, elimina ese alimento. Así comer sano te sentará bien y no tendrás efectos secundarios. No te fuerces a comer alimentos que sabes que no te sientan bien porque a otras personas si le sienten bien. 

Si a la hora de realizar la dieta notas que tu cuerpo no reacciona bien, siempre tienes la opción de acudir al médico para que te examine. Así podrás conocer un poco más a tu cuerpo y darle lo que realmente necesita. La ayuda de profesionales siempre es una gran opción.

  1. Elige snacks saludables

Incorporar snacks saludables en tu dieta es fundamental para mantener la energía y evitar el hambre excesiva entre comidas. Opta por opciones nutritivas como frutas frescas, yogur griego, nueces, zanahorias baby o palomitas de maíz sin mantequilla. Estos bocadillos proporcionan nutrientes esenciales y ayudan a mantener el equilibrio de tu dieta. 

Al elegir snacks saludables, puedes evitar elecciones poco saludables y contribuir a un estilo de vida equilibrado. Además, prepararlos en casa te permite controlar los ingredientes y las porciones, promoviendo una alimentación más consciente y beneficiosa para tu salud.

  1. Apuesta por la vida activa

La alimentación es importante, pero también la actividad diaria. Si no quieres tener problemas, te recomiendo optar por la vida activa. Ambas cosas se complementan y te harán sentirte mejor en todos los aspectos. 

El ejercicio ayuda a mantener un peso saludable, mejorar la salud cardiovascular y fortalecer los músculos. Encuentra una actividad que disfrutes, ya sea caminar, nadar, hacer yoga o cualquier otro deporte, y conviértelo en una parte regular de tu rutina.

Ahora que ya tienes esa información solo tienes que poner los consejos en práctica y comenzar a disfrutar de una vida más feliz. Al principio igual te cuesta un poco, pero rápidamente te adaptarás. 

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