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Postres chinos típicos

Quizá los postres no es lo primero en lo que piensas cuando alguien menciona la gastronomía china, pero lo cierto es que existen una gran cantidad de dulces emblemáticos en este país, sobre todo relacionados con algunas festividades señaladas como el Año Nuevo.

Si algo caracteriza los postres chinos típicos son los ingredientes con los que se elaboran la mayoría de ellos, que surgen del cultivo tradicional y no se suelen utilizar en la repostería de otros países, sobre todo occidentales.

Hoy descubriremos algunos de estos postres típicos, con qué se elaboran y un poco más sobre su historia para acercarnos a la historia y tradición de China.

10 dulces típicos chinos

No todo está hecho a base de arroz glutinoso, sésamo y pasta de frijol rojo dulce, aunque muchos de ellos sí, así que hoy veremos con qué se hacen los dulces típicos chinos más allá de lo que conocemos y que seguro que nos sorprenderá.

10. Barba de dragón

Este dulce típico chino no solo es llamativo por apariencia sino también por su nombre, pero es muy parecido al algodón de azúcar que conocemos en los países occidentales.

Se dice que la barba de dragón surgió hace más de 2.000 años gracias a la creatividad de un emperador, pero no hay nada que respalde esa teoría y es más bien considerado una leyenda. 

La barba de dragón se llama así porque está compuesto por fibras finas y alargadas de azúcar que parecen las barbas de los dragones tradicionales de la cultura china y se elaboran básicamente con azúcar calentado y manipulado.

9. Helado frito 

Aunque ahora nos parece un postre de lo más normal en muchos restaurantes asiáticos de occidente, hasta algunos años nos parecía una auténtica locura pensar en que algo tan frío como el helado pudiera comerse frito. 

El helado frito chino se elabora con una bola de helado congelada (mucho más fría de lo que lo estaría habitualmente) que se baña en huevo crudo y galleta troceada para freírlo todo junto. 

Habitualmente se come tal cual se fríe, pero en algunos locales le añaden canela, azúcar glasé, vainilla, miel o sirope de algún sabor, como chocolate o fresa, para hacerlo todavía más dulce.

8. Bolas de sésamo

Sus orígenes se remontan a la dinastía Tang, entre el 618 y al 907 a.C., donde el actual emperador se aficionó a comer estas bolas que con el paso de los siglos se ha acabado convirtiendo en uno de los dulces típicos de toda China.

Llamado en chino jiān duī, este dulce se elabora con bolas de harina de arroz glutinoso fritas y cubiertas con semillas de sésamo, a las que también se les mete un relleno de pasta de loto o frijoles dulces.

Actualmente se pueden encontrar en cualquier tienda de alimentación o panadería china e incluso en la mayoría de tiendas de alimentación asiáticas de todo el mundo.

7. Sopa de frijoles

Los frijoles rojos se utilizan mucho en la gastronomía asiática en general como ingrediente para endulzar dulces y postres, y en China no es una excepción. 

Esto sumado a la afición de la cocina china por las sopas dulces, tenemos uno de los platos más típicos de la cultura china a lo que es difícil catalogar como plato o postre.

En invierno se sirve caliente y en verano fría, y se prepara con frijoles rojos cocinados con cáscaras de mandarina y semillas de loto. 

Hay quienes también le añaden arroz, leche y otros ingredientes para que tenga más sustancia sin que resulte empalagosa.

6. Pastel de flores

Yunnan es una de las regiones de China donde mayor variedad de platos podemos encontrar por la influencia de sus habitantes pertenecientes a muchos grupos minoritarios diversos, y uno de los puntos del que surgen algunos de los dulces más populares del país. 

El tradicional pastel de flores es un ejemplo de ello, un dulce elaborado con una masa fina parecida al hojaldre que se rellena con pétalos de rosa endulzados

Este ingrediente tan especial viene por el cultivo de rosas en la región y por la tradición de incluir flores en muchas de sus recetas.

Se cree que estos dulces tienen beneficios para la salud, por lo que muchas personas lo comen además de por su rico sabor.

5. Dantà

Las dantà se conocen también como tartaletas de huevo y no son exclusivas del territorio chino, sino que llegaron a Macao de la mano de los portugueses. 

El postre llegó en 1920 a la ciudad portuaria de Guangzhou, donde el comercio internacional estaba a la orden día, y estos dulces ganaron popularidad a tal velocidad que hoy en día es uno de los dulces típicos de China y se puede degustar por todo el país.

Las tartaletas están hechas con una masa crujiente en el exterior que deja al descubierto por arriba el relleno de huevo muy parecido a la crema pastelera, y se puede conseguir en cualquier horno recién hechas, que es como mejor están.

4. Buñuelos de calabaza

Estos dulces de aspecto dorado pueden parecer más bien un aperitivo salado a primera vista, pero son uno de los dulces típicos chinos más populares que surgió de la provincia de Sichuan, al sur de China, y que se extendió finalmente por todo el país. 

Las tortitas de calabaza chinas se elaboran con harina de arroz glutinoso, muy utilizada en postres por su textura y sabor, con pasta de calabaza, azúcar y en ocasiones también se añade pasta de frijol rojo para endulzar.

Una de las claves de su popularidad, además de su sabor, es su corteza crujiente y su relleno suave y pastoso por dentro, sobre todo si se sirven tibios como manda la tradición.

3. Tánghúlu

Si alguna vez visitas China, sobre todo Beijing, podrás encontrar puestos callejeros con esta delicia típica.

El tánghúlu original se elabora con espino montañés típico de China que a la vista parecen como manzanas muy pequeñas que se clavan en un palito de madera y se recubre con pasta de frijol rojo para hacerlo más dulce. 

Actualmente se ofrecen sobre todo durante el invierno y con otras muchas frutas, como fresas, piña, kiwi, uvas e incluso tomates, además de cambiar la pasta de frijol por azúcar o un baño de caramelo para hacer la experiencia todavía más deliciosa.

2. Mántou

Muy parecidos a panes fritos, los mántou son unos bollos con forma de malvavisco de tamaño grande que se hacen al vapor y que pueden acompañar a otros platos tanto dulces como salados.

Una forma muy popular de comerlos es friéndolos un poco y sirviéndolos con un poco de leche condensada, lo que sin duda los vuelve deliciosos e irresistibles para cualquier paladar.

Se dice que la receta de los mántou surgió en la dinastía Han, entre el 206 y el 220 a.C., donde era uno de los alimentos básicos en todo el país, especialmente en la zona norte.

1. Pastel de luna

Si no los has probado, seguro que los has visto en alguna fotografía o supermercado especializado. Los pasteles de luna, o yuèbǐng, se reconocen al instante por su característico entramado de la parte superior del pastel.

Su nombre viene dado porque se suelen comer en el Festival de la Luna celebrado a principios de otoño, entre septiembre y octubre, mientras se observa la luna en compañía de amigos y familiares.

Estos pasteles tienen una corteza consistente pero tierna, y el relleno puede variar mucho: desde frijol rojo o pasta de semillas de loto para los más tradicionales hasta crema pastelera.

5 postres para el Año Nuevo chino

El Año Nuevo chino se celebra el 12 de febrero y cuenta con muchas actividades y gastronomía tradicionales que merece la pena conocer, ver y probar. 

Los postres son una parte fundamental de esta celebración no solo por su delicioso sabor, sino porque también son un símbolo de buenos augurios.

5. Galletas de nueces

Aunque podamos pensar que unas galletas de nueces pueden ser algo demasiado sencillo para una ocasión tan especial como es el Año Nuevo, debemos pensar que hay muchos elementos de la cultura china que tienen un significado muy diferente para nosotros.

Las nueces en la gastronomía y tradición china están estrechamente relacionadas con la felicidad, por lo que estas galletas se comen en estas fechas señaladas con la esperanza de empezar un nuevo año lleno de felicidad.

El origen de estas galletas se remonta al siglo XVI y su receta está basada principalmente en las nueces, que se utilizan tanto para la masa de las galletas como para decorar, azúcar, harina, huevos y manteca de cerdo.

4. Anillos de azúcar

Conocido en su lengua original como Tangyuan (aunque anteriormente, con el reinado de otro emperador, se denominaba Yuanxiao), estos anillos de azúcar se sirven en la mañana de Año Nuevo para compartir con la familia, ya que su significado gira alrededor del concepto de unidad. 

También es un dulce muy popular entre los niños por su dulce sabor y textura crujiente, además de por su curiosa forma de flor. 

El Tangyuan también se come durante toda la celebración del Año Nuevo y la Fiesta de los Faroles, sobre todo en el sur de China, cuando habitualmente toda la familia se reúne para estar en compañía y comenzar el nuevo año de la mejor forma posible, que es compartiendo estos dulces.

3. Pudin de arroz “8 tesoros”

Este postre también se denomina “Pudin de arroz con ocho tesoros”, y no es de extrañar si tenemos en cuenta que el número ocho es muy importante en la cultura china al estar vinculado con la buena suerte.

La importancia de este postre viene porque se elabora con 8 ingredientes o “tesoros”: azufaifas rojas, semillas de loto, longas secos y otras frutas confitadas; por lo que se cree que comerlo traerá la buena suerte para el próximo año. 

La base del pudín se hace al vapor y se endulza con azúcar y mantequilla para después decorar la parte superior con los tesoros. 

2. Tangyuan

Este plato típico del Año Nuevo chino es muy peculiar, sobre todo por su apariencia, ya que se trata de una especie de sopa con bolitas de arroz hechas a mano a las que se le añade colorante de diferentes colores para resultar en un poste muy vistoso.

Este postre se introdujo en la festividad del Año Nuevo por la dinastía Han hace más de 2 mil años y que dura hasta hoy, donde las familias se reúnen para compartirlo, recordar el pasado de su familia y honrar a sus ancestros.

Se suele comer particularmente el último día de la celebración de Año Nuevo, sobre todo en el sur de China. Su nombre puede resultar confuso para los extranjeros por ser igual que el de otro dulce típico chino de estas fiestas.

A la receta original también se le añade almendra troceada, puré de cacahuete o semillas de sésamo negro.

1. Nian gao

El nian gao, literalmente traducido como “pastel pegajoso”, o pastel del Año Nuevo chino, es el postre emblemático de esta fecha y representa el progreso y el crecimiento para el año que comienza. 

Para hacerlo solo necesitamos azúcar, agua y harina de arroz glutinoso, por lo que es un postre muy sencillo de preparar y con un sabor no muy llamativo en comparación con los rimbombantes dulces de otros países. 

Todas las familias chinas compran o elaboran uno para esta festividad o también se regala a amigos o familiares si se visitan en estas fechas, y se utiliza una sartén especial para cocer la pasta con los ingredientes.

5 postres chinos para niños

Los niños también tienen sus propias preferencias cuando hablamos de postres y observar lo que más les gusta es una buena forma de profundizar en la cultura gastronómica de un país.

5. Dim sum

Los dim sum son unos bollos pequeños cuyo relleno puede variar desde la fruta y la verdura hasta carne o marisco y que se sirven en bandejas como aperitivos, pero que también son muy populares para llevar y comer en cualquier parte.

Su nombre proviene del cantonés y su traducción literal sería “tocar el corazón”, probablemente porque su sabor es tan rico que emociona.

Lo que ha convertido el Dim sum en un postre popular entre los niños chinos es que se puede llevar fácilmente al colegio y comer fuera de casa, ya que se considera un tentempié ideal para mitad de mañana o para merendar por la tarde.

4. Bollo de piña

Aunque su nombre puede confundir, los bollos de piña no están elaborados con piñas, sino que la parte superior tiene una forma parecida a la corteza de esta fruta y por eso se le puso ese nombre.

Los bollos de piña son postres muy típicos del sur de China, Tairán y Hong Kong, y a los niños les gusta mucho sobre todo por el sabor dulce de la parte de arriba.

Los bollos de piña se elaboran con manteca, azúcar, harina y huevo para la parte superior y la inferior de pasta glutinosa; y en ocasiones se rellena de crema pastelera o mantequilla.

3. Douhua

Aunque no hay una única receta para este postre chino, la elaboración más frecuente se realiza a base de tofu a modo de masa muy blanda cubierta de ingredientes dulces.

El douhua también se denomina “pudin de tofu”, aunque se sirve en un plato de sopa y puede tener un aspecto bastante similar a una sopa densa.

En el norte de China se suele acompañar la base de tofu con salsa de soja, teniendo un sabor más salado, mientras que en Taiwan se tiende más al dulce acompañando el tofu con frijoles rojos dulces, tapioca, avena, almíbar y frutos secos, la versión más popular entre los niños y jóvenes.

2. Pastel de Año Nuevo

El “pastelito pegajoso” tradicional chino ya ha sido mencionado en este texto, pero sigue siendo una de las opciones favoritas de adultos y niños. 

Preparado a base de arroz glutinoso, el nian gao se consume sobre todo en Año Nuevo en compañía de amigos y familiares para comenzar el año de forma apropiada y con la esperanza de tener un nuevo año próspero y feliz.

La clave de su popularidad entre los niños no es tanto por su sabor sino por su forma, ya que puede adoptar cualquier forma si utilizamos diferentes moldes, pudiendo encontrar nian gao con formas de animales que llaman mucho la atención.

1. Helado frito con toppings

No es de extrañar que el postre favorito de los niños chinos sea el helado frito: es muy dulce y se pueden añadir muchos toppings para hacerlo todavía más rico.

La clave para hacer helado frito es hacerlo durante unos pocos segundos en aceite muy caliente, de modo que no se derrite al estar más congelado de lo habitual.

La base del helado frito es una bola de helado a temperatura mucho más baja de lo normal que se baña en huevo crudo y se recubre con galleta triturada para automáticamente freírlo todo. 

Para redondear su presentación se pueden añadir siropes de sabores, canela, miel e incluso fideos de colores.

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